Pablo Moyano fue elegido para sumarse al triunvirato de conducción de la CGT junto a Héctor Daer y Carlos Acuña, durante un congreso realizado en parque norte que definió las nuevas autoridades de la central obrera y relegó a cargos menores a los gremios más cercanos al kirchnerismo.
El metalúrgico Antonio Caló debió conformarse con ocupar la secretaría de Interior, mientras que los bancarios Sergio Palazzo y Claudia Ormaechea, ambos con una banca de diputados asegurada el 10 de diciembre, se incorporarán al consejo directivo. La judicial Vanesa Siley, también integrante del bloque de Máximo Kirchner, no tuvo lugar.
Palazzo y Siley fueron los cupos sindicales que usó Máximo Kirchner para armar su lista de la provincia de Buenos Aires. Otro de sus dirigidos es Walter Correa, titular del Sindicato de Obreros Curtidores (SOC), que encontró un espacio en la Comisión Arbitral.
Roberto Baradel lograría ubicar como secretaría de Asuntos Municipales sería ocupada por el Sindicato Único de Trabajadores y Empleados de Buenos Aires (Sutecba).
Moyano no pudo asistir por encontrarse con fiebre, pero su ascenso es la vuelta del gremio de camioneros a la conducción tras los años de liderazgo de su padre. Daer, de sanidad, queda como representantes de los sindicatos de servicios (los gordos) y Acuña, del gremio de estaciones de servicios, representa la pata de Luis Barrionuevo.
Caló pretendía seguir representando a los industriales en la cúpula y le quitó dramatismo a su desplazamiento. «Uno de los desafíos y de los temas más importantes para la futura gestión de la CGT será la lucha contra cualquier intento de Reforma Laboral», anticipó. La secretaría de gremial quedó para Mario Manrique, de Smata.
La nueva secretaría de Ciencia y Tecnología sería ocupada por un representante del gremio de televisión; en Prensa continuará Jorge Sola (Seguro); Sergio Romero (UDA) en Políticas Educativas, y Gerardo Martínez (Uocra) en Relaciones Internacionales.
Fuente: La Política Online
