Argentina solicitará al Fondo Monetario Internacional un programa de facilidades extendidas, en un esfuerzo por retrasar el pago de los US$44.000 millones que le debe al organismo multilateral, según informó el ministro de Economía, Martín Guzmán.
El Gobierno argentino iniciará conversaciones formales con el FMI esta semana, cuando una misión dirigida por la subdirectora del Departamento del Hemisferio Occidental, Julie Kozack, llegue a Buenos Aires el martes 10 de noviembre. Un programa de facilidades extendidas le daría al país al menos cuatro años y medio para comenzar a pagar su deuda una vez que sea aprobado, dijo Guzmán.
“El staff del FMI y el Gobierno argentino consideran que en las circunstancias actuales, ese tipo de programa es la mejor alternativa disponible”, dijo a periodistas el lunes en el Ministerio de Economía.
El país también presentará un programa macroeconómico plurianual al Congreso, el cual determinará el sendero fiscal, las metas de financiamiento y las metas de reservas internacionales hasta 2025.
Tal como publicó PERFIL, en el gabinete económico se comentó en las últimas horas que en el nuevo acuerdo con el organismo es factible que se incluyan metas cuantitativas de emisión monetaria.
En lo fiscal, según admitieron fuentes gubernamentales, el Gobierno debería realizar un mayor esfuerzo, ya que la pauta de déficit del 4,5 por ciento que figura en el proyecto de Presupuesto 2021 no tendría el aval del organismo, debido a que el Fondo pediría una reducción de desequilibrio por debajo del 4% para el próximo año.
Esto permitiría además acelerar el camino de la Argentina hacia el equilibrio fiscal en un período de cuatro años, según estimaron las mismas fuentes.
Ese mayor esfuerzo fiscal se espera lograr con más presión tributaria, especialmente en Ganancias, Bienes Personales y retenciones, y mejora de la recaudación tributaria en forma genuina por recuperación de la actividad económica. «No vamos a ir por el lado de un ajuste del gasto público, eso no lo tenemos contemplado», detallaron desde el gabinete económico.
Fuente: Perfil
