«Ricardito Bussi es un bobo que por parecerse a Superman se pone el calzoncillo arriba del pantalón. Siempre supimos que su rol político era ser funcional a la tarasca y ahora el «pristino jurisconsulto» amigo de Jaldo y Vocal de la Corte Daniel Leiva habría manifestado la necesidad de protegerlo para que siga cumpliendo su rol de aliado parlamentario del bloque oficialista en la legislatura», expresó el Subsecretario de Tránsito Municipal, Enrique Romero.
Luego agregó: «Lo cierto es que la aptitud funcional y la vocación democrática del Vocal de la Corte ha quedado en duda y bajo sospecha, pero la vocación morralera de Bussi quedo expuesta y blanqueada».
«Lamentablemente, el travestismo político de Ricardito y en nombre de un pragmatismo grosero, carente de principios, su ideología es una mera etiqueta para seducir a incautos.
Para Bussi la traición es menos grave que el llano; es su propia debilidad humana la que es viciosa por su codicia. Codicia de poder, de dinero y de figuración», añadió el dirigente del partido PERON.
«Lo que asombra no es tanto la incoherencia criminal de ser un saltimbanqui, sino la frecuencia con la cual lo comete, así fue hijo putativo de Alperovich, declaro la necesidad de la reforma para luego de decir que Jaldo era un gran demócrata porque lo recibía y cambió de actitud, o cuando intentó pegarse a los Intendentes Campero primero y a Sánchez después Su dignidad está tan mermada que ya construye sobre lodo y arena su decadencia política», concluyó Romero.
