El legislador Ricardo Bussi es un fuerte crítico de los gastos de la política. Pero la realidad indica que una buena parte de los impuestos de los tucumanos van a parar a los bolsillos de «la fuerza moral»-
Fuentes de Fuerza Republicana deslizaron que el bloque de legisladores que comanda Bussi con mano de hierro tendría unos 700 empleados, que supuestamente insumirían unos 1000 millones de pesos del presupuesto provincial.
Cualquier tucumano de bien imagina todas las mejoras que se podrían hacer con ese dinero en salud, seguridad o educación.
¿Por qué recibirían los supuestos «opositores» semejantes montañas de dinero?
La fuerza moral de los tucumanos tendría una posición de privilegio en el manejo de la Cámara con sus socios políticos del PJ.
A través de un acuerdo con el peronismo, FR impuso como Vicepresidenta de la Legislatura a Sandra Orquera, cuñada de Bussi.
Según algunos peronistas, el bloque de Bussi, con media docena de bancas, superaría en cantidad de empleados por cada legislador a otros sectores políticos.
Este año, en el medio de la disputa que dividía al peronismo tucumano, se supo que los 14 integrantes del bloque Lealtad Peronista se quedaron sin personal. Entonces, más de 1.100 contratos fueron dados de baja. Ese número resultaría en un promedio de 80 empleados por cada legislador.
Los salarios de los asesores, muchos de los cuales no trabajarían, varían según la categoría.
Muchos familiares, amantes, novias y amigos integrarían las listas de nombramientos. También habría testaferros que supuestamente cobrarían y devolverían el dinero a sus jefes.
Los ingresos más bajos rondarían los $ 70.000 mensuales y los más altos $ 180.000, y hasta podrían duplicarse cuando se agregan extensión horaria, título y otros ítems.
Fuente: Contexto
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