Con la oficialización del gabinete que acompañará al presidente Alberto Fernández a partir del 10 de Diciembre, han tomado cuerpo las versiones que señalaban que militantes camporistas podrían quedarse con la conducción local de algunos organismos nacionales.
La confirmación de que la diputada nacional Luana Volnovich asumirá la conducción nacional del PAMI, robustece las suposiciones que indican que en la administración de la delegación local de la obra social de los jubilados quedará el ex legislador provincial y actual concejal famaillense, Jesus Salim.
Por otro lado, algunas hipótesis sugerían que el diputado nacional mandato cumplido, Marcelo Santillán, quedaría a cargo de la conducción local de la ANSES. Sin embargo en la presentación del gabinete, Fernández no oficializó a quien comandará el organismo que todavía administra el macrista Emilio Basavilbaso. Por lo tanto el destino de Santillán todavía aparece como una incógnita, más aún luego de que desde La Gaceta, apuntaran al ex parlamentario nacional camporista, como candidato a ocupar la silla que dejaría Tobías Gordillo, cuando termine su mandato como delegado en Tucumán, del degradado Ministerio de Trabajo de la Nación.
Otra de las carteras que los militantes kirchneristas miran con apetencia es el Centro de Referencia (CDR) del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación. Si bien hay algunos ex dirigentes camporistas que se aventuran operando para ocupar esa delegación, lo cierto es que desde el Movimiento de Unidad Popular, conducido a nivel nacional por Federico Martelli, pidieron la delegación ministerial para el referente del MUP a nivel local, Luis Romano.
Sin embargo, hay quienes dan por descontado que el CDR podría quedar en manos del referente provincial del Movimiento Evita, Luciano Chincarini. Quien estaría en condiciones de confirmar quien ocupará esa delegación sería la diputada nacional con mandato cumplido Alicia Soraire, quien monitorearía todos los CDRs desde una secretaría que dependerá directamente del nuevo ministro de Desarrollo Social de la Nación, Daniel Arroyo.
La hegemonía del sector camporista liderado por Salim, posibilitaría que algunos dirigentes de su entorno puedan «sopar» algunos otros cargos. En ese sentido, el ex Subsecretario de Asuntos Estudiantiles de la UNT, Ricardo Zupán, aparece como candidato a quedarse con la delegación local de la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT); y el militante camporista Martín Cartés podría llegar a la Secretaría de Políticas Universitarias (SPU). Además también podrían «ligar» con este esquema los aliados salimistas: el legislador Daniel Deiana, que podría quedarse con el Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (INAES) y el ex Subsecretario Económico Financiero de la UNT, Miguel Ángel Carletti, quien aspira a llegar a la Dirección Nacional de Migraciones.
Por otro lado, encumbrados dirigentes aseguran que desde el entorno de Alberto Fernández habían establecido que serían los gobernadores quienes se encargarían de designar a los funcionarios nacionales en sus jurisdicciones. Sin embargo, nada hace suponer que se pueda evitar la discusión por el «cupo cámpora».
