El partido Propuesta Republicana (PRO) se convirtió esta tarde en un impensado actor protagónico en la novela que tiene como figuras estelares a la Unión Cívica Radical (UCR) -en la persona de su presidente, el diputado Roberto Sánchez– y al Partido por la Justicia Social -materializado en su titular, el intendente de San Miguel de Tucumán, Germán Alfaro-.
Ocurre que las autoridades de la fuerza que sentó el anterior presidente de la Nación -y que más presidenciables ostenta para los comicios nacionales de este año- no se sumó a ninguno de los frentes electorales que presentaron sus socios ante la Junta Electoral Provincial (JEP), sino que, por el contrario, inscribieron su propia alianza.
En efecto, en su carácter de máxima autoridad de la UCR, Sánchez, en yunta con las autoridades de la fuerza Propuesta Ciudadana -agrupación del legislador Paulo Ternavasio, ex Fuerza Republicana- había anotado la coalición “Juntos por el Cambio”. El alfarismo, en tanto, se había adjudicado la autoría intelectual de la inscripción del frente “Juntos para Cambiar Tucumán”, anotado por los representantes de los partidos “De las Ciudades en Acción”, de Daniel Coronel, y “Compromiso Ciudadano Independiente”, de María Teresa Arias.
Esta tarde, Pablo Walter y Marcelo Wechsler, los interventores del distrito Tucumán del PRO, inscribieron una coalición entre ese partido y la agrupación “Compromiso Tucumán”, del edil de Yerba Buena José Macome y del dirigente Héctor Monayer. Este frente, sin embargo, no riñe con los otros dos asociados a la principal fuerza opositora en el país. Fundamentalmente porque, según precisó Walter a LA GACETA, no se trata de una alianza que vaya a presentar fórmula para gobernador y vicegobernador, sino solamente para cargos legislativos -legisladores y concejales- y ejecutivos municipales -intendentes-.
“En las próximas horas trabajaremos para que finalmente haya un solo frente de Juntos por el Cambio. Si eso se concreta, nos acoplaremos a la fórmula unificada, y solo disputaremos candidatos a intendente y los cargos legislativos. Si no se da este frente único, lamentablemente elegiremos acoplarnos a uno de los dos frentes; pero ese sería el ‘mal menor’”, explicó Walter.
Consideró que sería un fracaso rotundo que la coalición que llevó al Gobierno a Mauricio Macri en 2015 no logre acordar una sola fórmula en Tucumán para los cargos de gobernador y de vicegobernador en la elección del 14 de mayo. “No concibo qe exista chance alguna de que Juntos por el Cambio vaya quebrado. Ningún candidato y ningún partido en forma individual es más importante que Juntos por el Cambio como unidad. Me parece increíble que fuerzas políticas que están a pocos meses de sentar un presidente de la Nación no puedan darles a los tucumanos la posibilidad de que se suban esa ola de cambio que existe en el país”, añadió.
Recordó que la mesa nacional de Juntos por el Cambio había decidido que en aquellos distritos donde no rija la posibilidad legal de definir candidaturas mediante una elección interna, y no se pueda alcanzar el consenso, se echa mano a encuestas para resolver las postulaciones. “La opción de ir fracturados no existe. Estamos muy molestos con la actitud del radicalismo”, cerró.
Fuente: La Gaceta
