Agustín G., tiene 25 años, cursa actualmente 4º año de la carrera Ingeniería Civil en la UNT, y ayer a la tarde se pegó el susto de su vida. Es que cuando volvía de visitar a sus familiares del Bº Kenedy, mientras manejaba su Fiat Uno blanco modelo 98, cuando estaba por ingresar al Bº Lomas de Tafí por el acceso de la Avenida América, su auto recibió el impacto de una bala.
Apenas pasó el shock, Agustín G. advirtió a sus amigos, vía whatsapp, sobre la desgracia con suerte recientemente acontecida en las intersecciones de la Avenida América y Camino del Perú. Posteriormente el mensaje se viralizaría en los grupos de whatsapp, y finalmente Diario Lomas podría contactarse con el joven Agustín G., quien reconstruiría su temerosa historia, que gracias a Dios, concluyó sin víctimas fatales.
“Yo vivo en Tafí Viejo, en las inmediaciones del Bº Próspero Mena. Me encontraba en la Av. América y Colombia visitando familiares, y cuando me dispongo volver aproximadamente a las 17:30 horas, decido hacerlo como habitualmente hago ese recorrido, es decir por la Av. América, para ingresar al Barrio Lomás de Tafí y de ahí salir a la diagonal e ir hacia Tafí Viejo. Varias veces me habían dicho que el cruce es peligroso, pero uno cree que la gente por ahi exagera o que a uno no le va tocar. Yo venía solo en el auto, cuando estaba llegando a la vía, y bajo la velocidad porque ahí hay que cruzar despacio, siento un reventón, como una explosión y después veo que el vidrio de atrás estaba reventado. Pensé que podría haber sido una piedra, pero veo un orificio pequeño en el vidrio y todo el vidrio astillado. En ese momento me dio un miedo terrible, agaché la cabeza y aceleré. Anduve unos 150 metros creo, por suerte no me crucé nadie porque podría haber atropellado a alguien. Después miré por el retrovisor y ví que en una moto venían dos personas con casco en una moto. En ese momento de locura pensé que eran delincuentes, que me estaban siguiendo y que se venía el segundo disparo. Por eso aceleré y llegué hasta la heladería de la Alfonsín y Jaldo, ahí bajé los decibeles y pensé que capaz que los tipos de la moto no tenían nada que ver, y eran simples ciudadanos que se transportaban con casco, pero preferí quedarme con la duda” comentó el joven Agustín, que además es músico cesionista y operador de sonido en vivo de la banda La Pineal.
“Me da mucha bronca porque al auto lo estaba intentando vender, y pareciera que ahora me tengo que conformar con menos mal que no te paso nada. Por suerte a mi no me pasó nada, pero cuando me comuniqué con la policía me dijeron que es la tercer caso que se registra en el mismo punto en lo que va del año. Espero que la difusión de esta noticia sirva para tomar conciencia, no para que los vecinos desistan de circular por la zona, sino para que se incremente la presencia policial en la zona y las autoridades correspondientes tomen cartas en el asunto” expresó a Diario Lomas el joven Agustín G, concluyendo así su testimonio.
