En las últimas horas se conocieron detalles del registro de crímenes del informe sobre homicidios de 2016 que elabora la Corte Suprema de Justicia de la provincia, a través del Plan de Monitoreo Preventivo de Criminalidad Violenta.
Los datos se mantuvieron en secreto en los dos últimos años. Sin embargo, fuentes judiciales deslizaron los datos estadísticos que se están analizando y que, en grandes rasgos, indicaría que en 2016 hubo 119 crímenes, un 4% menos que en 2015, que llegaron a 123. En 2013, el número de crímenes fue de 112 y, en 2014, se pasó a 109, según ese trabajo.
Dentro de ese cuadro estadístico, los especialistas aseguran que los homicidios en ocasión de robo –el delito más aberrante que tira a tierra todos los informes estadísticos- tuvo una disminución del 10%. Sí se incrementaron los crímenes por violencia intervecinal (30%) y por posible ajuste de cuentas (167%).
En el informe, cuyos datos eran guardados bajo cuatro llaves, se puede encontrar que también bajaron los homicidios en ocasión de riña (-25%) –que en definitiva es otra expresión de violencia- y de violencia intrafamiliar –donde se encuentran los femicidios- (-13). Pese al hermetismo impulsado por la Corte, fuentes judiciales indicaron que estos números no tendrían grandes modificaciones cuando sean presentados oficialmente.
